El personal era super amigable, el alojamiento era maravilloso y muy limpio. Había habitaciones prácticas, con un buen diseño y modernas con tanto cocina como un jacuzzi. En general tiene una ubicación excelente muy cerca de muchos restaurantes y bares, del cañón y también de las tiendas de regalos. Más aún, el hotel estaba a un agradable paseo de Wild West Junction. No tengo ninguna queja, recomendaría este lugar, me ha gustado todo.

Su personal ha sido desatento.

El Grand Canyon Hotel es el lugar perfecto para hospedarse antes o después de visitar el gran cañón. El ambiente vintage y la decoración centenaria del alojamiento le dan un encanto único. Las habitaciones, equipadas con lavabo, son acogedoras y el baño compartido se mantiene limpio y cercano a las habitaciones. La pequeña sala compartida cuenta con sofás, una nevera grande y una cafetera para el desayuno, lo cual es ideal para comenzar el día. El hotel ha mantenido su esencia y te hace sentir como si estuvieras en otra época. El personal de recepción es encantador y el ambiente de la calle donde se encuentra el hotel es auténtico y lleno de historia.

No dudaría en recomendar este hotel.

El hotel es muy limpio, se encuentra en un edificio de estilo antiguo, en una ubicación cómoda y también ideal. Un personal muy servicial y muy amable con una buena dosis de buen humor. Tienen mucha variedad de platos para elegir, la comida es buena. Me ha encantado todo, os lo aconsejo.

Hotel único, es un lugar cómodo para explorar Williams. Empleados muy amables con buenos modales. Las habitaciones con té, un jacuzzi. La comida del restaurante estaba buena y el restaurante era excelente.

Una ubicación cómoda y también ideal.

Una cama cómoda, una habitación temática y práctica, con un buen diseño. Un baño grande, un personal muy servicial y muy amable. Ubicación muy, pero que muy cerca de varios lugares, como las tiendas de regalos y el centro de la ciudad. Y está a sólo 5 minutos a pie de Williams Recreation Park.

nuestra estancia en Williams fue maravillosa gracias al encantador Grand Canyon Hotel. La ubicación perfecta en el centro del pueblo y el ambiente vintage del hotel nos cautivaron. El personal amable y servicial hizo que nos sintiéramos como en casa. Sin duda, el hotel más antiguo de Arizona es una joya que no te puedes perder.

Falta de espacio en la habitación.

Una habitación lo suficientemente espaciosa, moderna con café y una cocina y té. Además, tiene una ubicación excelente para ver Williams Depot.

La habitación familiar era práctica, con un buen diseño y también interesante a términos de precio, con una cocina, tenía de todo. Fue agradable encontrar una nevera y cristalería.

El hotel está muy bien ubicado, en el centro de la ciudad y cerca del Gran Cañón. Además, está rodeado de bares y restaurantes, lo cual es muy conveniente para disfrutar de la vida nocturna. También está al lado de una estación de tren, facilitando el transporte hacia otros destinos.

Hay que tener en cuenta que algunas habitaciones pueden ser un poco pequeñas y las camas pueden ser algo incómodas.

Me ha gustado un montón la habitación, la cama era bastante buena. El lugar tenía una ubicación céntrica muy, pero que muy cerca de tienda de regalos y de una estación de tren y también de varios restaurantes estupendos.

Una ubicación ideal y bonita a poca distancia del Santa Fe Lake.

No había desayuno.

Lo mejor de este hotel fue la decoración de época de las habitaciones y el trato amable del personal. Las habitaciones eran preciosas y te permitían elegir la que más te gustara. También había té y café gratis, y una nevera compartida, microondas y espacio para tomar desayuno o comida. La ubicación del hotel era conveniente, ya que pudimos visitar el Gran Cañón durante nuestro viaje.

Tiene habitaciones lo suficientemente espaciosas y moderna que cuentan con ventiladores, un jacuzzi, café👌

Es una pena que el baño sea demasiado pequeño.

Me encantó el ambiente vintage del hotel, todas las habitaciones estaban decoradas con objetos antiguos y llenas de detalles encantadores. Además, pude elegir la habitación que más me gustaba. La ubicación del hotel era perfecta, todo estaba a un paso. Y lo mejor de todo fue la amabilidad del personal de recepción, siempre dispuestos a ayudar.

No puedo dejar de mencionar que la cama era un poco vieja y se hundía, lo cual no resultó muy cómodo para descansar la espalda. Además, cuando acudimos al personal para resolver un problema, no pudieron ayudarnos y solo estaban disponibles hasta las 9pm.

Este era un hotel tradicional perfecto en una ubicación ideal y bonita. Mi habitación era práctica, con un buen diseño y también interesante a términos de precio, con camas cómodas y también ventiladores. Quedé satisfecho con la comida, era buena y tenía un montón de platos.